HISTORIAS QUE QUIZÁ NO CONOCES: LA OBERTURA 1812 DE TCHAUKOSKI TERCERA PARTE, FUSAS ORIGIN.

Guten morgen, Divina pareja. Hace un montón de tiempo que había un señor que, por allende el Internet, llamaban "El Johnnys" y que solía subir algún articulo de vez en cuando. Pero mirad por donde, El Johnnys ha vuelto. Y no en balde hoy os traigo un artículo sobre una obertura Rusa, "La Obertura Rusa" por excelencia en este blog. Así que en honor a este aniversario hoy os traigo el artículo que os ascenderá al nivel "insertar nivel" de la escala de poder de Dusendorf.

Pos mirad, que nos quedamos por donde empieza mi parte preferida de la pieza. Aquí unas cuerdas vientos metales y madera hacen un acorde de Fa sostenido mayor, lo cual está en otra tonalidad pero es igual, porque a Tchuakoski le gustaba mucho eso de modular. La melodía que llamaré besmiatesi, plácido muy malamente escrito en ruso, procede a bajar y después volver al comienzo en un Fa mayor, que ahora es la nueva tónica. La tensión aparece cuando un acorde de Fa disminuido se distingue de entre el amasijo de notas. Rápidamente se recompone y la besmiatesi se repite exactamente igual. Después de ésta, una línea melódica asciende mientras un acorde de Do sostenido con séptima número cinco evoca a un sentimiento tempestuoso. Este, sin mucha demora, se aparta para dar lugar a un acorde de Fa mayor que se siente como agua después de correr.

Dios mío, como estoy hoy. Parece que me he desayunado el cerebro de Albert Einstein de verdad, que culto me he vuelto de repente. 

El acorde de Do sostenido con séptima número cinco insiste dale que te pego con salir en la pieza, que es que obviamente se está haciendo el interesante el saborío. Y es por está razón por la que el señor Tchaukoski está muy indeciso, porque no se pone de acuerdo a ver que acorde pone. "Ay, que es que este acorde está to bonito, pero es que este otro es muy chulo. Ay no sé." ¿Qué? Así es como hablan los rusos en mi mente.

La melodía descendente sigue, esta vez es como las otras. Segundas mayores y menores y terminando con una cuarta, porque entre una y otra hay exactamente cuatro notas. Cuidaico que es que vienen curvas (Alerta marrano) pues un nuevo acorde nuevo salió de la na', que a ver que demonios pinta aquí, aparece. No es ni más ni menos que un acorde disminuido de Fa sostenido con séptima mayor. ¿Qué decís? ¿Que no os habéis enterado de nada? Pues mirad, yo tampoco.

La tensión se suelta con un chimpún de toda la vida, una segunda menor que desemboca en un acorde de Sol mayor que evoca momentos de felicidad y admiración por personas que son admiradas por sus admiradores que los admiran. ¿Qué tampoco lo entendéis? Pues yo tampoco.

De nuevo la tensión de un acorde disminuido de Fa sostenido con séptima mayor, vaya, que nombre tan corto. Pero esta vez es resuelto por un Sol mayor con séptima mayor. Todos aquí son mayores, no es apto para menores.

Por su parte la besmiatesi sigue insistiendo, pero esta vez está dando notas reiteradas con semitonos de diferencia en cada una. Pero para para y respira, y le siguen saltos descendentes de segundas mayores. Y hace un salto muy bonito, ya que es una quinta seguida de una octava y por último segundas mayores. Todo mayor, aquí nada cortito. Repiten el temazo que son segundas de diferentes índoles repetidas una detrás de la otra. Están Octavadas, ojo al dato.

Los acordes de tensión es que se crían como conejos en celo, y la melodía esta se está viniendo tan arriba que es que más en el top no puede estar. Cuéntenme a mí cómo. Pero de repente pasa lo impensable que pensábamos que no iba a pasar. Resulta que aparece un acorde ajeno a la tonalidad que suena como el presagio de lo que se avecina. ¡Y no sabéis lo que viene! Este acorde es un acorde de Re sostenido mayor.

A éste le sigue un acorde tenso de Sol sostenido mayor con una sexta número 3. Termina la besmiatesi con un inesperado Sol sostenido mayor. Aunque últimamente no nos esperamos tantas cosas que es que ya no nos sorprende nada. ¿Cierto Annabelle?

Y de la nada los acordes menores trágicos y profundos entran en la sala. Se repite la besmiatesi, sí, pero con acordes menores como armonía. Como supongo que ya os habréis dado cuenta, Divina pareja, esto le da un aura oscura, misteriosa y triste a la canción. En este caso, ahora suena un acorde de Re sostenido menor, que es como un Fa sostenido mayor solo que cambia un tono, lo cual, lo trastoca todo dramáticamente. Lo sigue un acorde de Sol sostenido mayor con una sexta número 3, que no entiendo como tiene un nombre tan largo si solo son tres notas. Con un pequeño cromatismo abre la veda de los vientos madera que repiten la besmiatesi a modo de canon y coda con las cuerdas. Es decir, un pequeño recordatorio de la melodía  mientras lo repiten otras veces a diferentes tiempos entre sí. Un acorde de Re sostenido mayor, después un Re disminuido y por último un Re sostenido de nuevo. Los vientos lo dan de todo octavado en una tonalidad de Mi bemol mayor. A ver, Tchaukoski que yo entiendo que te guste modular todo el rato, pero es que eres un poco pesao. Es que uno se lía con tantas tonalidades de verdad Tchukoski. Bueno, igualmente está muerto.

Y por decimonovena quinta sexta vez Tchaukoski cambia de tonalidad, y ahora suena muy triste. Bastante de hecho. Y ahora no lo acompañan acordes mayores y disminuidos, si no acordes menores y disminuidos. Esto suena misterioso, maquiavelico, cansino en el sentido malvado de la expresión, un poco megalomano, trémulo, mortuorio, melancólico y triste. Es que este Tchaukoski es un genio. Un maldito genio incomprendido.

Mientras siguen sonando los acordes tristes y toda la pesca comienza de nuevo la tercera melodía que llamé... No me acuerdo, pero el punto es que suena exótico. Al principio es muy sencillo, pero con el tiempo se va repitiendo con más rapidez. El acorde de Re disminuido da énfasis a la entrada de la melodía exótica de las panderetas, que se compone de flautas octavadas, una pandereta to guapa y unas cuerdas subiendo por terceras mayores y menores. Sobretodo menores. Al principio de la melodía es una cuarta descendente que va bajando hasta el mi sostenido, y sube y vuelve a repetir.  Va variando el Tchaukoski una miaja pa que no se vuelva monótona la pieza, de hecho empieza a sonar un poco oriental. Empieza siempre reiterando el Mi y regresando a él. En él empieza y en él se vuelve.

Pero ahora termina en un Si bemol y regresa a él. Por esta parte comienza la marcha y el rock and roll. Mirad, la pandereta cesa y unas flautas empiezan en un Fa y regresan a él. Posteriormente bajan rápidamente hacia el Si bemol y para la marcha repentinamente para quedarse encallado en una cuarta, repitiendo la melodía de la pandereta sin la pandereta. Baja mucho a lo bestia y la repite dos octavas por lo menos más abajo, quedándose repitiendo la parte del principio en la que da semitono arriba  semitono abajo. Creo que es un oboe, pero no estoy seguro. El punto es que la melodía que baja en grados conjuntos y termina con una cuarta sigue. Y mientras las cuerdas dan tensión reposo, el viento cesa la melodía y le sigue la misma melodía con las cuerdas. Sin embargo, esto no dura mucho y termina con un Mi bemol y un Re bemol, uno detrás del otro.

Ahora empieza un movimiento solo de cuerdas que es muy tenso y movido, tampoco hay mucho que explicar. Solo decir que las cuerdas ascienden con semitonos envueltos en tensión y después una trompeta se queda encallada en un Re mientras, un timbal (creo que es un timbal) da un redoble. En ese momento los vientos metales tocan de nuevo la melodía militar.  

Posteriormente, las cuerdas por segundas mayores y menores ascienden y vuelve el timbal o lo que sea el instrumento. La trompeta insiste, pero esta vez con un re bemol. La melodía de nuevo es acompañada por cuartas y las cuerdas con una tensión incontenida. Esta es simplemente acordes disminuidos de todas índole posibles. Y ahora sí, un timbal da un golpe y las cuerdas acompañadas con vientos metales dan infinidad de acordes disminuidos de una manera ascendente y para finalizar se repite un par de veces más hasta que toda la orquesta se une para alzarse y tocar Mis, Res y Dos disminuidos descendentes. Los timbales y los platillos lo dan todo y parece que el señor del trombón o trompeta o todos ellos le va a petar un pulmón. Al final de todo, y esta vez de verdad, los metales intercalan Fas sostenidos mayores mientras las cuerdas dan cromatismos junto a los vientos madera muy reiterativos. Y es en este momento que comienza otra vez esa melodía que ya expliqué el anterior artículo, lo que pasa es que no me acuerdo como la llamé. Pero se queda como la melodía chunga de cuerdas. Van interpelando algunos acordes de Re sostenido mayor y menor, que rápido y con las cuerdas dando por saco suena muy tenso. Créanme. 

Todo esto desemboca en un desenlace épico entre vientos metales que se van comprimiendo hasta acortarse y, por fin, se consigue escuchar una resolución del tema militar con cuartas y eso. Se va ralentizando hasta que suena un leitmotiv, que espérense por favor que yo os explico lentamente. Veréis, comienza descendiendo por cuartas menores, exactamente en un Mi bemol. Posteriormente suena un alegre y melodioso si mayor y, por último,  otro Si mayor pero esta vez una octava más abajo.
Después se va repitiendo más o menos el Si mayor una y otra vez. Hasta que, de nuevo, comienza la  besmiatesi y vuelta o los origin in de world.  No hay nada más que relatar porque es la misma melodía con la misma armonía, tampoco es para comerse el coco.
Simplemente la melodía de la pandereta que suena un poco oriental lo hacen esta vez unas cuerdas octavadas, la armonía se da con la inestimada ayuda de los vientos madera. Es un acorde de Re sostenido menor y un acorde de Fa disminuido. Evoca cosas así bien lúgubres y misteriosas.
Para ir terminando que es que no tengo toda la tarde, resulta que al final del movimiento las cuerdas hacen el último leivmotif de la pandereta sin la pandereta. Es mas o menos así: Un Mi que sube y después al llegar al Do repite lo mismo pero desde el Do.

Y bueno, esto ha sido todo por hoy y espero que estéis pasándolo divinamente allí donde estéis. Divina pareja, feliz aniversario y hasta la próxima. Ah, y recordad, os deseo buena suerte y fortuna a vosotros Divina pareja, dulces sueños y Gute Nacht.